Una bicicleta es un vehículo de cambio capaz de transformar las ciudades y brindar una mejor calidad de vida, especialmente cuando la bicicleta está plenamente integrada en las políticas de gobernanza local.
Los objetivos de Lisboa para aumentar el uso de bicicletas en el sistema de movilidad global de la ciudad se ajustan a los siguientes objetivos, en perfecta armonía con la conferencia Velo-city 2021 Lisboa:
2021 es un año clave, que brinda una oportunidad para una mayor articulación y evaluación de una variedad de temas relacionados con la bicicleta y el fortalecimiento del intercambio de ideas y mejores prácticas para aumentar el uso de la bicicleta.
La conferencia Velo-city 2021 brinda, a Lisboa, la oportunidad de celebrar y reconocer la importancia de su viaje hacia el desarrollo sostenible en un momento clave. Se ha hecho mucho, pero también queda un largo camino por recorrer y el compromiso debe ser perseverante.
A pesar del enorme crecimiento de la red de carriles bici de Lisboa - desde sus primeros 3 km inaugurados en 2001 - hasta la actual red de carriles bici exclusivos, de 100 km en Lisboa, los objetivos establecidos para 2021 son muy ambiciosos: una red de carriles bici de 200 km, asegurando que el 93% de la población vivirá a menos de 300 metro de una ciclovía interconectada, lo que casi duplica el 49% actual de la población que tiene acceso a este privilegio.
También está en funcionamiento un sistema público híbrido de bicicletas compartidas, cuya expansión inicial está prevista, para finales del 2020, en 1.410 bicicletas y 140 estaciones de acoplamiento distribuidas en varios puntos de la ciudad, llegando así a más del 32% de la población de Lisboa.
A nivel internacional, Lisboa es conocida como una ciudad con un enorme desafío en materia de movilidad, aunque pionera de tendencias, y considerada por las empresas de movilidad más importantes como un "Living Lab" ideal para probar nuevas soluciones.
Desde 2017, la Cámara de Lisboa ha estado invirtiendo fuertemente en transporte público, especialmente en la red de autobuses y tranvías, renovando y ampliando la flota para un mejor servicio y rendimiento, esforzándose así por atraer a más personas para que utilicen el transporte público.
Las bicicletas ahora pueden viajar en todo momento en el metro de Lisboa, en trenes urbanos, regionales e interurbanos, en las rutas de autobús para bicicleta de Carris y en todos los ferrys que cruzan el río Tajo.